miércoles, 20 de enero de 2016

¿TRABAJADORES O NEOESCLAVOS? LA CONSPIRACIÓN DEL CAPITALISMO


Resultado de imagen de Somos esclavos?

¿Realmente somos dueños de nuestras vidas? ¿Hasta que punto nuestro “estado de bienestar” es una ilusión creada a propósito para mantenernos, como sociedad, sumisos hacia las grandes corporaciones? Lo que usted está a punto de leer es, posiblemente, altamente perturbador. No obstante, en este veremos sin medias tintas como puede que la famosa “abolición” de la esclavitud tuviese unas intenciones, digamos, algo más sibilinas más allá de las que nos han hecho creer. 
Introducción 

Quiero comenzar este breve extracto de un extenso trabajo de análisis social que próximamente verá la luz preguntándole una cosa: ¿Es usted realmente feliz? ¿Se siente realmente libre? ¿Siente que sus derechos se cumplen? Si su respuesta es si, le recomiendo leer este artículo, aunque advierto que pudiera ser que sus esquemas se rompan. Si, por el contrario, su respuesta es no, puede cotejar las diferentes circunstancias para poder comprobar si encaja en el perfil de la nueva humanidad, al cual realmente pertenecemos. 

Comencemos … 

Voy a ir directamente al grano. ¿Sabían ustedes cuanto costaba un esclavo en un mercado, por ejemplo, de Nueva Orleans? En el S. XIX, último periodo de la esclavitud en el sur de Estados Unidos, el precio de un esclavo estaba en torno a la friolera de 190.000 dólares, cifra calculada tras un estudio de la tabla de actualización monetaria, más fiel por la proximidad de aquella época. No obstante, si lo aplicamos, por ejemplo, al periodo del Imperio Romano, no podríamos calcular exactamente cuanto costaría, y tan solo podríamos realizar un cálculo en virtud del coste de vida, específicamente de productos básicos de la época: alimentos y vestuario.

Así, teniendo en cuenta que un esclavo tenía un coste en el Imperio de 1.500 denarios más o menos, y que un denario, según los círculos que se consulten, tiene un valor medio de 85 €, nos sale un coste de compra de 127.000 € por esclavo. 

Debemos de dejar claro un punto importante: Los esclavos romanos eran, en su gran mayoría, prisioneros de guerra y su fin era, mayoritariamente, el servilismo. Por el contrario, el esclavo americano, digamos, el históricamente más reciente que se reconoce oficialmente, era destinado a producir. 

Y ahí, en este último dato, está el meollo de la cuestión: ¿Era rentable tener un esclavo? 

Primeramente, conviene recordar que uno de los puntos clave de la Revolución Industrial era, precisamente, el avance tecnológico que, inevitablemente, haría que la esclavitud, a la larga, tuviese cada vez menos sentido. 

En consecuencia, la vieja Europa, donde existían salarios, se encontraba con una tesitura algo comprometida: La tecnología, efectivamente, había mejorado las condiciones laborales y se hacía necesaria menos mano de obra. Por ello, se abría un gran abanico de posibilidades para aumentar la economía de los patrones: Sus empleados ya podían consumir sus productos habitualmente –sobre todo vestuario y alimentos-… ¿Tenía sentido tener esclavos que, además de consumir recursos del amo, no consumían lo que producían? Además, debido a las comunicaciones con el más que floreciente nuevo continente, suponían una competencia desleal hacia sus factorías. 

Por lo tanto … ¿Hasta que punto la guerra civil americana, fuera de sus buenas intenciones, tenía fines ocultos? Si ganaban, como así fue, expandían su “imperio” al recién creado país y, además, ganaban alrededor de 9.000.000 de consumidores -más o menos el censo de población negra de la época en estado de esclavitud, cifra nada desdeñable-, y, además, por si fuera poco, eliminaban la competencia. 

Hoy en día comparado con aquella época puede que seamos más “libres”, puede que tengamos más “bienestar”. Pero… ¿Es justa nuestra condición? ¿Es justo que, para poder comer o tener necesidades vitales tengamos que depender del dinero y, por ende, del yugo de una empresa? ¿Es sano para la humanidad que, hoy día, estemos más desunidos como sociedad que nunca y, por un salario, unido a la desesperación de llegar a fin de mes, la gente llegue a realizar verdaderas locuras y humillaciones? 

Y no solo eso, si tenemos en cuenta que antes, y no siempre, las cadenas eran físicas, ahora son mucho peor: ahora las cadenas son basadas en deudas -hipotecas, prestamos, financiaciones varias…-, lo que hace que hayamos creado una sociedad atada por muchos años a un trabajo que hace que cada día vaya muriendo en vida lentamente, sea humillado, vapuleado o rodeado de un ambiente dañino. Todo vale para cumplir a fin de mes. 

Todo azuzado, claro está, por una agresiva publicidad que condicionan a la gente a consumir, a ser más que el vecino, a ser más que nadie, a ambicionar hasta el infinito y, en consecuencia, a ser un ser individualista: Divide y vencerás. Al final, no solo trabajan, sino que deben dinero al amo. 

No es más rico hoy en día el que más posee, más si el que no tiene deudas. 

Todo esto no tendría posibilidades de existir si la gente, en conjunto, pudiese cuestionar su modo de vida. Evidentemente, habrá voces díscolas, para algunos unos locos, para otros unos antisistema, que se dan cuenta de la cuestión. Pero, volviendo al pensamiento social, ¿Da tiempo a pensar después de una semana laboral cada vez de más horas, llegando a casa reventado y, llegando el fin de semana, practicando un ocio extenuante? Viernes: salida nocturna que dejan a la gente el sábado realmente cansada hasta la noche que, repitiendo la jugada, llegan a un domingo que manda descanso hasta el lunes, que vuelve a empezar la mal traída rutina que, si bien no se riega con alcohol, tiene físicamente efectos similares. Es precisamente el alcohol, una droga socialmente admitida y amparada, casualmente, por los legisladores, lo que hace que la gente evada su frustración ante una vida de cadenas. 

No podemos obviar distracciones de masas, como el fútbol –espectáculo que casualmente se celebra los domingos por la tarde en su mayoría, cuando la gente, entre cansancio, pesar y, muchos, con resaca, podría vislumbrar su realidad-, programas de televisión basura que, igualmente, se emiten en horarios “ociosos”, y un sin fin de bombardeos de estímulos que nublan la mente de los que nos creemos libres. 

Curiosamente, la Revolución Industrial marca un punto de afianzamiento a un sistema nacido -casualmente- en Inglaterra para sustituir al sistema feudal: El capitalismo. Sistema que, si se hubiese llevado bien, hubiese ofrecido infinitas posibilidades pero, una vez más, nuestra condición de seres codiciosos y déspotas ha derruido lo que pudo ser y no fue. Hoy, el capitalismo está el clara decadencia la cual no está muy claro su fin, ha llegado, sin ningún género de dudas, a un punto de implosión. 

Y es que, el actual capitalismo, el exprimir la clase trabajadora hasta la extenuación, genera interesantes paradojas, como, precisamente, la que protagoniza este artículo: Trabajar para ser pobre. ¡Pero ojo! El capitalismo ha generado, curiosamente, parches para salvar el bote, y estos son las empresas low cost, o lo que es lo mismo, el empobrecimiento del consumo que, a su vez, genera pobreza en los trabajadores de dichas empresas, pues, de todos es sabido, el empresario generalmente nunca pierde. ¿En que acabará todo? 

Sea como fuere, mientras socialmente nos sigan dividiendo con ideologías políticas que murieron realmente tras finalizar la II Guerra Mundial, mientras nos sigan dividiendo por condiciones sociales absurdas -rico es Bill Gates, Amancio Ortega, Slim … no quien vive en una urbanización cara, este, en todo caso, es acomodado-, mientras nos sigan dividiendo por equipos de fútbol -¡absurda y tristemente por este motivo muere gente cada año!-, por religiones, por razas, y por muchos más motivos, ellos ganan y podrán apretar más la tuerca. Solo existen dos clases: La dominante y la dominada, no hay más. 

Queda claro, pues, que la Revolución Industrial marcó una frontera entre el esclavo que cobraba en especie y el esclavo que trabaja a cambio de satisfacción material inmediata, pues, a fin de cuentas eso es lo único que gana a cambio de vivir en un estado permanente de angustia y estrés.

Los esclavos negros del sur de Estados Unidos vivían, de media, 9 años más que un trabajador “libre” del norte, pues, aunque esclavos, suponían una inversión al amo y, como han podido ver, no era una inversión desdeñable, debía ser cuidada. 

No es baladí, por tanto, que las sociedades actuales, las productivas y libres, sean las número uno en suicidios, en consumo de estupefacientes, en consumo de fármacos psicoactivos… A fin de cuentas, la libertad que nos venden pasa factura. 

Y, si no tiene deudas y, encima ahorra, que sepa que es enemigo declarado del sistema, que ha adiestrado a sus esclavos para que sea repudiado y flagelado. Y, para postre, el propio capitalismo crea sistemas, como la inflación, para que esta se coma los ahorros de la gente media como usted o como yo cada ciertos años. 

No hablemos ya de pequeños propietarios de un patrimonio normal, condenado a pagar impuestos por un inmovilizado que no genera réditos, por ejemplo, una vivienda habitual. Además, si se muere, en ciertos países -o micropaises de facto, como los que tenemos en España más conocidos como Comunidades Autónomas-, los impuestos que tendrán que pagar sus herederos a veces provoca que el esfuerzo que ha dedicado pagando dicho bien acabe en manos del aparato del Estado al no tener posibilidad los legítimos destinatarios de pagar los leoninos impuestos que les imponen para tomar posesión de la/s propiedades. 

Todo está pensado para que gane la banca, la élite extractora y vampira. 

Pablo Moreira 
(Visto en http://periodismo-alternativo.com/)


¿Somos esclavos?

Puerta estelar en Irak: ¿Verdad o Mito?

Resultado de imagen de Puerta estelar en Irak: ¿Verdad o Mito?

¿Existe una puerta estelar en Irak? muchos investigadores así lo creen, en este vídeo programa les muestro las evidencias...


El Universo es Una Mente

cerebro_md

Quizás todo lo que existe en el universo, solo sea una proyección de nuestra propia menta y nada exista en realidad, la idea del universo mental, se plantea desde hace milenios y se populariza en occidente por una serie de libros heméticos como “El Kybalion”.
En el siguiente video, explicamos esta interesante idea filosófica, esperamos que os guste.


LA VERDAD OCULTA DE LA MÚSICA (Conspiración Del Sonido)

Resultado de imagen de LA VERDAD OCULTA DE LA MÚSICA (Conspiración Del Sonido)

Toda la materia es sonido y emite sonido, aunque no seamos capaces de percibirlo.
El sonido, junto con el pensamiento y la emoción, forman la fuerza más poderosa de todo el universo, tanto para bien como para mal.
El sonido es capaz de modificar la materia, sanar o enfermar, e incluso, de acelerar el crecimiento de las plantas.
Debemos ser conscientes que de nosotros depende cambiar nuestro microuniverso, es decir, nuestro cuerpo, y el macrouniverso. Así de poderosos somos los seres humanos.
Toda la música que escuchamos en este momento, genera una frecuencia inarmónica con el planeta y con el ser humano, ya que en 1963 se cambió la afinación a LA=440 hz, y para conseguir una vibración armónica, se debería afinar la música a LA=432 Hz.
Hay un montón de ejemplos de música en Internet que se puede escuchar, con el fin de establecer la diferencia por uno mismo.
SUSCRÍBETE:http://goo.gl/0RdwAo


Free Otegi, Free Them All

Resultado de imagen de Free Otegi, Free Them All

LIBERTAD PARA ARNALDO OTEGI; PRESOS VASCOS, A CASA
Hace ya cinco años el movimiento independentista vasco abrió un profundo debate sin precedentes que concluyó con una apuesta inequívoca por vías exclusivamente pacíficas y democráticas, renunciando a la violencia en su reclamación del respeto a la autodeterminación del País Vasco, y con una disposición nítida a cerrar totalmente, por medio de la palabra y el diálogo, el largo conflicto violento que ha asolado la región desde hace décadas.

En octubre de 2011, ETA respondía positivamente al llamamiento realizado desde la Conferencia Internacional de Aiete (San Sebastián) que le demandaba el cese definitivo de su actividad armada de más de 50 años y la apertura de un proceso de diálogo.

El Premio Nobel de la Paz Desmond Tutu señaló a Arnaldo Otegi, en su día portavoz de Batasuna y hoy secretario general de Sortu, como “el líder de este proceso de paz”. Efectivamente, Otegi fue el dirigente más destacado entre aquellos que propiciaron en las fuerzas independentistas el debate sobre la necesidad de apostar por la palabra para solucionar todo conflicto. Su apuesta por vías exclusivamente pacíficas y democráticas fue respondida con su arresto, en octubre de 2009, y con su posterior condena a más de seis años y medio de prisión por pertenecer a la organización política Batasuna, ilegalizada previamente por el Gobierno español.

Desgraciadamente, el fin de la actividad armada de ETA, que ha mostrado su disposición a un proceso de desarme y de diálogo y reconciliación que tenga en cuenta el dolor de todas las víctimas, no ha traído consigo todavía respuesta positiva alguna por parte del Estado español.

Arnaldo Otegi, cuyo caso ha sido recurrido ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, se encuentra en una prisión española alejado de sus familiares y amigos. Así están también cerca de 500 presos vascos relacionados con este conflicto. Dispersados en prisiones lejanas al País Vasco, frecuentemente incomunicados, esta realidad provoca, además, un castigo añadido a sus familiares, abocados a recorrer largas distancias para poder visitarlos.

Ante esto, pedimos la libertad inmediata del hombre que supo arriesgar por la paz y la democracia, de quien apostó por la palabra cuando parecía que nadie lo haría. Su liberación y el final de la política de alejamiento, como paso previo a la excarcelación temprana de los presos vascos, son pasos necesarios para poder alcanzar una paz justa y duradera en la región.

Por humanidad. Por justicia. Porque creemos en una solución sin vencedores ni vencidos. Porque apostamos por la paz. Por eso pedimos libertad para Arnaldo Otegi y el traslado de los presos al País Vasco.




EUS: “Free Otegi – Free Them All” kanpainak beste aurrerapausu bat eman nahi du eta askatasun eskari bat askatasun aldarri bihurtu. Horretarako, Euskal Herriko hainbat musikari, abeslari eta artista batu ditu nazioarteko kanpaina honek, guztien artean abesti bat grabatzeko eta mundu osoan zehar zabalduko den bideoklip bat egiteko. Hitzaren aldeko apustua egiteagatik preso dagoen ahots bat isildu nahi izan dutenei erantzun nahi zaie, hainbat ahotsen batasunarekin, hitzez eta kantuz.

Informazio gehiago: www.freeotegi.com/eus

ES: La campaña “Free Otegi – Free Them All” quiere dar otro paso adelante y convertir un grito de libertad en un canto de libertad. Para ello, músicos, cantantes y artistas de Euskal Herria se han sumado a esta campaña internacional para grabar una canción y un videoclip que quieren difundir por todo el mundo. Una suma de voces para responder al intento de silenciar una voz. Cantar para reivindicar el derecho a hablar.

Más información: www.freeotegi.com/es

EN: The campaign “Free Otegi – Free Them All” wants to take another step forward and transform a call for freedom into a freedom song. To do this, musicians, singers and artists from Euskal Herria have joined this international campaign to record a song and a video clip they want to spread worldwide. A sum of voices to respond to the attempt to silence a voice. Singing to claim the right to speak.

More info on : www.freeotegi.com

-Kredituak:

Letra: Edorta Jimenez
Musika: Joserra Senperena

Joserra Senperenak ekoiztuta

Kantariak (agerpenaren ordenean):

-Mursego
-Aitor Gorosabel
-Jon Gurrutxaga
-Joseba Tapia
-Uxue Alberdi
-Oier Aranzabal
-Niko Etxart
-Furia
-Petti
-Asier Serrano
-Unai Iturriaga
-Ines Osinaga
-Francis
-Sorkun
-Xabi Solano

Musikariak:

-Rafa Rueda, gitarra, ahotsa
-Karlos Aranzegi, bateria
-Migel Artieda, baxoa
-Iñigo Egia, perkusioa
-Joserra Senperena, teklatuak, ahotsa


martes, 19 de enero de 2016

Grandes mentiras mundiales - Los bancos


Resultado de imagen de Grandes mentiras mundiales - Los bancos

Extracto del documental "Cuánto le costará al planeta" donde se pone al descubierto las grandes mentiras que difunden los gobiernos en complicidad con las Organizaciones mundiales, las cuales no tienen otro objetivo que servir a una élite mundial que está colonizando silenciosamente todo el planeta.

Documental completo "Cuánto le costará al planeta":
https://www.youtube.com/watch?v=8sYkA...