Al que escribe estas lineas nunca le ha interesado la politica. Mas que nada porque no creo en ella. Me parece simplemente una manera de tener al pueblo engañado, haciendonos creer que somos nosotros quienes decidimos quien y como nos gobierna. Gran mentira. En realidad los politicos no son nada mas que meras marionetas en manos de quienes realmente controlan el sistema. Es decir en manos de quienes controlan el dinero. Arnaldo tampoco iba a ser una excepcion. Por muy buenas voluntades que tendria, nunca le iban a dejar llevarlas a cabo. Pero dejemos la politica a un lado y hablemos de arnaldo como ciudadano.
Un ciudadano que quiso cambiar la historia proponiendo la paz. Una paz que todos ansiabamos. ¿ Todos?
Parece ser que no. El que menos queria esa paz era el mismisimo gobierno español.
¿Como es posible sino,que a un ciudadano que esta proponiendo la paz, le metan preso?
No ha matado a nadie, no ha robado al pueblo, cosa que muchos de los que ocupan los escaños del parlamento no pueden decir. Podemos hablar de los gal, simplemente del terrorismo de estado, del caso barcenas, de la financiacion de los partidos. de los eres en andalucia , del caso gurtel, y un largo etc conocido por todos. Luego se podia hablar de todo lo que todavia no ha salido a la luz pero saldra.
¿Donde estan todos esos autenticos delincuentes? En la carcel desde luego que no. Ya se encargan ellos de blindarse bien teniendo unos jueces que nunca van a condenar a quien les ha puesto ahi.
Arnaldo no es ningun delincuente. No se merece estar en la carcel. Lo que se merece es el premio nobel de la paz.
Ha pagado con su libertad, el que desde hace ya unos años, no haya mas muertos.
Arnaldo, un ciudadano que simplemente quiso dar un giro en beneficio de todos. Un giro que al que menos interesaba era al gobierno español y a quienes lo manejan desde la sombra.
No creo que haya nadie, que pueda entender que un ciudadano este preso, por querer acabar con la violencia y vivir en paz.
Que justicia de mierda tenemos, como se atreven a llamarlo justicia cuando lo que hace es justo lo contrario.
Injusticia, asi se tenia que llamar para ceñirnos a la autentica verdad. Una injusticia que deja libres a todos los que realmente tenian que estar en la carcel y mete en la carcel a alguien que lo unico que ha hecho con su esfuerzo y libertad , ha sido que no haya mas muertos.
Yo propongo el premio nobel de la paz para Arnaldo Otegi. Premio que se merece mas que Obama.
Un premio, el de Obama, que no tiene sentido. ¿ Como se puede dar un premio por la paz a alguien que tiene el mundo en permanente guerra?
Esta es la historia del reves. Los que tienen que estar presos, estan libres, los que se merecen un premio estan en la carcel.
Mando un abrazo de animo a Arnaldo y a los 18 detenidos en el dia de ayer pertenecientes a herrira.
Otra nueva injusticia como tantas otras que tenemos que ver a diario.
Cuando el mundo funcione como tiene que funcionar realmente, que es justo al reves, no lo dudes Arnaldo, te daran el premio, porque tu si te lo mereces.
darih
Nadie puede negar a estas alturas que vivimos en una deudocracia. Un régimen legal pero ilegítimo impuesto por la alianza de las grandes entidades financieras, la denominada troika (FMI, BCE y UE) y los gobiernos nacionales y regionales que desarrollan redes opacas de clientelismo y corrupción, cuya ineludible consecuencia es un régimen de mafias, un sistema fallido e intrínsecamente corrupto. Está red clientelar está siendo investigada actualmente en nuestro país por haber financiado durante años las campañas políticas del Partido Popular y sus dirigentes, a cambio de suculentos contratos con la administración pública, y salpican a toda la plana mayor del partido, incluido el actual presidente del Gobierno Mariano Rajoy, acusados todos ellos del cobro de sobresueldos no declarados . Estamos hartas de tanta mafia y de que no escuchen la voz de los millones de personas que hemos salido a la calle y de las que que sin haber salido están cansadas de tantas mentiras, y de tanto egoísmo, tanta demagogia populista y tanta propaganda. Vivimos las consecuencias de nuestra historia reciente: el gran fracaso de una transición que perpetuó la dinámica corrupta de las grandes familias financieras y “empresaurias”. El régimen bipartidista que sufrimos actualmente no es más que parte del sistema que favorece, precisamente, a estas grandes familias y no a la inmensa mayoría. Que se vaya la mafia.
