La ciencia social se está militarizando para desarrollar «herramientas operativas» dirigidas a activistas pacíficos y movimientos de protesta. Un programa de investigación del DoD de EEUU está financiando universidades para modelar la dinámica de los disturbios civiles a gran escala en todo el mundo, bajo la supervisión de varias agencias militares de EEUU. El Pentágono sugiere que la vigilancia masiva de la NSA está parcialmente motivada como preparación para el impacto desestabilizador de las crisis ambiental, energética y económica.
El multimillonario programa está diseñado para desarrollar inmediatas actuaciones para altos funcionarios y tomadores de decisión en “la comunidad política de defensa”, y para informar a la política implementada por “comandos combatientes.”
Lanzado en 2008 – el año de la crisis bancaria global – la ‘Iniciativa de Investigación “Minerva DoD” asociada con universidades “para mejorar la comprensión básica del Departamento de Defensa de las fuerzas sociales, culturales, conductuales y políticas mundiales.
Entre los proyectos adjudicados para el período 2014-2017 existe un estudio dirigido por la Universidad de Cornell, gestionado por la Oficina de la Fuerza Aérea de los EE.UU. en el área de Ciencias de Investigación cuyo objetivo es desarrollar un modelo empírico “de la dinámica de movilización y contagios del movimiento social.” El proyecto determinará “la masa crítica (punto de inflexión)” mediante el estudio de sus “huellas digitales” como por ejemplo en los casos de “la revolución egipcia de 2011, las elecciones rusas de 2011, la crisis de Nigeria por los combustibles de 2012 y los disturbios de Turquía de 2913 por el parque de Gazi.
Los mensajes y conversaciones de Twitter se examinarán “para identificar a los individuos que hagan un contagio social”.
Otro proyecto de este año de la Universidad de Washington “tratará de descubrir las condiciones en las que los movimientos políticos encaminados a cambios políticos y económicos a gran escala se originan”, junto con sus “características y consecuencias.” El proyecto, gestionado por la Oficina de Investigación del Ejército de EE.UU., se centra en “los movimientos a gran escala que involucren a más de 1.000 participantes en la actividad”, y cubrirá 58 países en total.
“El Departamento de Defensa se toma muy en serio su papel en la seguridad de los Estados Unidos , sus ciudadanos y los aliados y socios de Estados Unidos. Aunque cada desafío de la seguridad no causa conflicto, y cada conflicto no involucra a los militares de EE.UU., Minerva ayuda a financiar los servicios sociales básicos en la investigación de la ciencia que ayudará a aumentar la comprensión del Departamento de Defensa sobre las causas de inestabilidad e inseguridad en todo el mundo.
Gracias a una mejor comprensión de estos conflictos y sus causas antes de que se produzcan, el Departamento de Defensa puede prepararse mejor para el futuro entorno de seguridad dinámica “.
En 2013, Minerva financió un proyecto de la Universidad de Maryland, en colaboración con el Departamento de Laboratorio Nacional del Noroeste del Pacífico de Energía de EE.UU. para medir el riesgo de malestar social debido al cambio climático. El proyecto que dura tres años está desarrollando modelos para anticipar que podría suceder a las sociedades bajo un rango de posibles escenarios de cambio climático.
Desde el principio, el programa Minerva fue programado para proporcionar más de 75 millones dólares en cinco años para la investigación de las ciencias sociales y del comportamiento. Sólo este año se ha asignado un presupuesto total de $ 17.8 millones por el Congreso de los EE.UU.
Un personal reveló que el programa está orientado hacia la producción de resultados rápidos directamente aplicables a las operaciones de campo.
Un correo electrónico interno del profesor Steve Corman, un investigador principal del proyecto, describe una reunión organizada por el Departamento de Defensa Humana Cultural Social y el programa HSCB en el que altos funcionarios del Pentágono dijeron que su prioridad era “desarrollar capacidades que puedan ejecutarse rápidamente” en forma de “modelos y herramientas que se pueden integrar con las operaciones.”
Aunque la oficina del supervisor de investigación naval había asegurado a los investigadores de la universidad desde el principio que el proyecto no era más que “un esfuerzo de investigación básica, que no debía de preocupar por su aplicación”, la reunión, de hecho, demostró que el Departamento de Defensa está buscando a “resultados contundentes al momento”, dijo Corman en un email.
Muchos investigadores independientes critican lo que consideran esfuerzos del gobierno de EE.UU. para militarizar las ciencias sociales al servicio de la guerra. En mayo de 2008, la Asociación Americana de Antropología (AAA) , escribió al gobierno de EE.UU. y señaló que el Pentágono no tiene “el tipo de infraestructura para la evaluación de investigación antropológica [y otras ciencias sociales]” de una manera que implique “un examen riguroso, equilibrado y objetivo”.
Según se desprenden de documentos de planificación del Pentágono la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) ejerce la vigilancia masiva motivada para prepararse sobre el impacto desestabilizador que están por llegar de crisis ambientales, energéticas y económicas.
Redacción Eternity con información extraída del periódico The Guardian
Documental- NSA, Agencia de Seguridad Nacional [Castellano]
Fuente: eternity/klaseobreratk
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