Fue en el año 2007, cuando me empecé a fijar que las estelas que dejaban los aviones no sólo no se disipaban, sino que se dispersaban, creando una falsa y artificial nube alargada, con influencia directa en el clima y las nubes normales. Desde entonces empecé a investigar, y sufriendo el fenómeno en silencio (como las hemorroides) pues siendo consciente de su gravedad y comentándolo – muy prudentemente - con las personas de mi entorno, éstas simplemente no podían verlo, y en consecuencia, te tomaban por paranoico (lo cual es normal y lógico). En el año 2014, cuando escribo estas líneas, existe a escala mundial y organizada de manera espontánea entre civiles un enorme activismo anti fumigación o dispersión de “aerosoles”, que dejan un rastro químico (CHEMicals TRAIL, Chem-trails, en inglés). Los medios e instituciones silencian deliberadamente el tema, al tiempo que confunden y engañan. Y CALLAN AL QUE QUIERE DIFUNDIR A GRAN ESCALA. Hoy día, gracias a grupos de redes sociales, muchísima más gente ha aprendido a OBSERVAR el fenómeno. Un fenómeno que oficialmente empezó hacia 1996, y que hoy se produce a escala masiva y mundial, y que a poco que mires, te puedes dar cuenta que NO ES EN ABSOLUTO NORMAL. En ese momento, las preguntas surgen: QUÉ FUMIGAN?? DÓNDE SE FUMIGA? QUIÉN LO HACE? Y SOBRE TODO, POR QUÉ??! Existe mucha, muchísima, abundantísima información en la Red (más que desinformación), por lo que se ruega investiguen, pues la información de hecho, se va actualizando y perfeccionando gracias al trabajo de héroes particulares y anónimos. Pero por si no tienen tiempo, pero si disponen de tres cuartos de hora, aquí tenéis un vídeo programa con una introducción y resumen al fenómeno de los Chemtrails, en sus múltiples y variadísimos aspectos, pues se trata de una figura con decenas de lados y caras, y más que están por descubrirse.
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